También fue apresado un médico del Servicio Penitenciario de Córdoba por la homicidio de un preso de 50 años, que estaba en prisión por una falta menor. Ocurrió en septiembre del año pasado y no descartan más detenciones.
El fiscal de Instrucción del Distrito 1, Turno 3, José Mana, ordenó la detención de 8 personas, entre ellas un ex director del módulo MD1 de la cárcel ubicada en la localidad de Bouwer, 6 guardiacárceles y un médico del Servicio Penitenciario de Córdoba.
Se los acusa de haber sido parte o encubrir las torturas y la posterior muerte del detenido César Darío Moreno (50) que había sido apresado por una falta menor y no registraba antecedentes penales, en septiembre de 2023.
Todo se dio en el marco de la realización de 10 allanamientos con la colaboración del Departamento Homicidios de la Dirección General de Investigaciones Criminales de la Policía de la Provincia de Córdoba, en distintos puntos de la ciudad de Córdoba, y en el Establecimiento Penitenciario N° 1 (Cárcel de Bouwer), en los que se concretaron las detenciones.
Los uniformados también secuestraron elementos personales, encontrándose pendiente la aprehensión de un efectivo penitenciario, de quien se espera que comparezca a la sede de la Fiscalía en las próximas horas.
La investigación que lleva adelante Mana está vinculada a una trágica muerte ocurrida entre el 16 y el 18 de septiembre pasado, dentro de la cárcel mencionada, donde se produjo el fallecimiento de un interno que se encontraba bajo custodia y con la colocación de medidas de sujeción mecánicas, es decir atado e inmovilizado sobre una camilla del servicio médico.
Moreno al ingresar al complejo de Bouwer, habría sido gravemente golpeado por personal penitenciario. Posteriormente fue atado e inmovilizado por más de 48 horas, sin brindarle atención sanitaria ni médica adecuada, producto de lo cual, a raíz de los severos padecimientos sufridos, su estado de salud empeoró, desencadenando su fallecimiento.
En los últimos meses Mana, reunió un importante caudal probatorio: filmaciones, documental, prueba testimonial, técnico científica, entre otras, que permiten sostener, en esta altura del proceso, la existencia del hecho y la participación de los ahora imputados, de acuerdo a lo informado por fuentes judiciales.
“Asimismo se realizaron allanamientos, secuestro de prueba digital, análisis interdisciplinarios por parte de la Dirección General de Policía Judicial y del Instituto de Medicina Forense, siguiendo lineamientos de instrumentos internacionales de referencia como lo son el Protocolo de Estambul y Minnesota para la investigación de hechos de tortura y muertes ilícitas en contextos de encierro”, agregaron desde el Ministerio Público Fiscal.
Los ocho detenidos, todos pertenecientes al Servicio Penitenciario de Córdoba, fueron imputados como presuntos autores del delito de “Tortura seguida de muerte” (Art. 144 Ter inciso 2 del C.P), un delito que prevé la pena de prisión perpetua.
Quedan todavía medidas de investigación pendientes que pueden derivar en futuras imputaciones, por lo que no se descartan más aprehensiones.