Un informe de CAME reveló un debilitamiento de la demanda y un deterioro de la situación financiera.
La actividad manufacturera de las pymes cayó un 19% anual en mayo y acumula una retracción de 19,1% en los primeros cinco meses del año, según un relevamiento de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).
“Los resultados dan cuenta de un debilitamiento de la demanda y un deterioro de la situación financiera”, aclaran desde el informe.
En la comparación mensual desestacionalizada la actividad creció 5,3%. También se observó un aumento de 0,2 puntos porcentuales en el uso de la capacidad instalada respecto al mes anterior, que igualmente se mantiene en valores bajos (70,3%).
En base a las expectativas de las industrias pymes, se realizó una encuesta donde el 33,9% de las respuestas esperan principalmente una reducción de impuestos, seguida por el estímulo a la demanda interna con un 14,7%.
La adecuación de las relaciones laborales ocupa el tercer lugar con un 14,2%, lo que subraya lo significativo de simplificar las regulaciones para facilitar las operaciones empresariales.
“Los empresarios priorizan las intervenciones directas que pueden mejorar su competitividad y eficiencia operativa, sobre opciones de financiamiento más favorables. En conjunto, el gráfico subraya las políticas deseables en busca de reducir la carga tributaria y fomentar el consumo interno, para lograr revitalizar la economía pyme”, argumentaron desde CAME.