El protocolo se rige bajo los principios de Asesoramiento gratuito; Trato cuidado y privacidad; Contención y acompañamiento; No re-victimización; Discreción y confidencialidad en el tratamiento de la información; Articulación para el cumplimiento del protocolo y Cooperación interinstitucional con profesionales vinculados a la problemática de violencia.
Los objetivos específicos del protocolo son:
a. Generar ámbitos de confianza y seguridad para que las personas afectadas puedan exponer su situación, a fin de hacer cesar de inmediato la problemática, estableciendo las responsabilidades, sanciones y medidas de protección correspondientes.
b. Poner a disposición un servicio de asesoramiento y asistencia, procurando cambios de conducta relativos a la discriminación, violencia laboral y/o violencia de género.
c. Difundir el presente protocolo en cada área de la Municipalidad de Río Cuarto.
Se consideran “situaciones de violencia de género” a “todas aquellas conductas, acciones u omisiones basadas en una relación desigual de poder, que de manera directa o indirecta, tanto en el ámbito público como en el privado, afectan la vida, libertad, dignidad, integridad física, psicológica, moral, sexual, económica o patrimonial, como así también la seguridad personal de las mujeres cisgénero, transgénero y personas LGBTIQ+, y en definitiva, todas aquellas que impliquen situaciones de violencia por razón de género”, fragmento de protocolo.